.Poco más de un año después de la conformación de la Siderúrgica Huachipato, ubicada en Talcahuano (abril de 1946), muchos de los trabajadores de la naciente usina (entre gringos y chilenos) coincidían en que era necesario crear una instancia recreativa que uniera al personal y que aportara distracción frente a la rutina del trabajo. En ese sentido, la idea de los funcionarios del Taller de Estructuras (Departamento de Ingeniería) de fundar una rama de fútbol le llenó el gusto a todos, ya que no había mejor cosa que el popular deporte para potenciar los lazos e incentivar la camaradería.
Así las cosas, varios representantes de este grupo de trabajadores acudieron a una notaría la fría mañana del 7 de junio de 1947 para fundar oficialmente una rama de fútbol, la que disputó sus primeros duelos en la cancha de la población Gaete, Pero lo que seguramente no pensaron este ramillete de pioneros amantes del fútbol fue que este noble emprendimiento se transformaría -años más tarde- en un importante club profesional, identificando a una buena parte de la población porteña y aportando con un sello distintivo al fútbol nacional (marcado por la seriedad institucional, y el desarrollo de las series menores). A continuación, 23 hitos del club acerero, tras casi 64 años de existencia: 1. Fundación: 7 de junio de 1947. 2. En 1950 ingresa a la Asociación de Fútbol Talcahuano, obteniendo rápidamente el título. 3. Un año después (1951) ingresa a la división de ascenso del Campeonato Regional. 4. En 1952, Huachipato asciende a la división de honor del fútbol regional. 5. 1956, el club obtiene su primer título en el torneo regional. 6. En 1964 llega el segundo título, en el marco del torneo regional. 7. En 1965 Huachipato ingresa a la segunda división profesional (debuta con Municipal Santiago, ganando 3 x 0). 8. En 1965 Huachipato interviene en el Campeonato Sudamericano de Equipos de Provincia (Argentina) y sale campeón, tras derrotar 2x1 a Liga del Sur de Bahía Blanca (primer título sudamericano de un equipo chileno). 9. Un año después, en 1966, el club obtiene el ascenso a la primera división. 10, El 9 de abril de 1967, Huachipato debutó en primera división (empata a uno con Audax Italiano, en el Estadio Nacional). 11. El 2 de febrero de 1975 el club obtiene su primera estrella (temporada 1974), en dramático partido final con Aviación (1 x 0). 12. 26 de febrero de 1975, Huachipato debuta en un torneo internacional -Copa Libertadores- con un empate en blanco, con Unión Española. 13. En 1979, Huachipato se consagra campeón del Torneo "Polla Gol" de segunda división. 14. El 9 de diciembre de 2012, el club obtiene su segunda estrella (Torneo de Clausura) al vencer, en infartante final, a Unión Española (definición a penales). 15. 14 de febrero de 2013, Huachipato vuelve a la Copa Libertadores después de 38 años y vence a Gremio, en Porto Alegre, 2 x 1. 16. El 16 de abril de 2014, Huachipato disputa la final de la Copa Chile, donde cae 3 x 1 con Deportes Iquique. 17. En junio de 2014 se crea la sociedad anónima deportiva Huachpato FC, controlada por el empresario Victoriano Cerda, separándose el fútbol del resto de las ramas deportivas (que siguen bajo el alero del Club Deportivo Huahipato). 18 En agosto de 2014 Huachipato debuta en la Copa Sudamericana, venciendo, en la primera fase a San José de Bolivia (3 x 1 en la ida y 3 x 2 en la vuelta). 19. Entre septiembre y octubre de 2014 Huachipato disputa los octavos de final de la Copa Sudamericana, instancia donde es eliminado por Sao Paulo de Brasil (0 x1 y 2 x 3). 20. En agosto de 2015 Huachipato vuelve a disputar la primera fase de la Copa Sudamericana, instancia en la que es eliminado por Olimpia de Paraguay. 21. En 2020 Huachipato juega otra Copa Sudamericana, en la que comienza venciendo a Deportivo Pasto de Colombia (2 x 0), pero finalmente es eliminado por Fénix de Uruguay (2 x 4). 22. En abril de 2021 Huachipato juega su cuarta Copa Sudamericana y en el debut vence a San Lorenzo de Almagro, en Buenos Aires (1 x 0). 23. 22 y 26 de enero de 2022, Huachipato disputa la liguilla de primoción con Deportes Copiapó venciendo en ambos duelos (3-2 y 1-0), con lo que se mantiene en primera división. Fue, sin dudar, el mejor equipo durante gran parte de la década de los sesenta y, también, uno de los más recordados en toda la historia del fútbol chileno, Hablamos obviamente del inolvidable "Ballet Azul", una escuadra que se conocía de memoria y que sometía a sus rivales con alta sincronización y toque vistoso. Pero más que un equipo de fútbol con los años la legendaria máquina azul se fue transformando en un club de amigos. En ese contexto, son muchas las historias que se tejieron en el transcurso de torneos exitosos y campeonatos ganados, sobre todo con la UC, el eterno rival de esos años.. Acá van algunas.
Las siestas del "Zorro" Era un clásico repetido en todas las concentraciones, giras o viajes. No había caso que el entrenador azul, Luis Alamos, dejara de lado sus inolvidables y largas siestas. Lo más increíble de todo es que apenas posaba su cabeza en la almohada era como si alguien lo desconectara. No sabía más nada del mundo. Sin embargo, su récord de sueño seguido no lo hizo en la U, fue en la selección y nada menos que en París (algo que perecería imperdonable). Esa vez el D.T. cayó en los brazos de Morfeo, por el espacio inimaginable de 16 horas continuas. De hecho, en esa ocasión algunos jugadores de la Roja comenzaron a inquietarse, pero luego de la extensa jornada de "tuto" apareció el "Zorro" como nuevo. Un crack. Los desvelos de Marcos Hablando de sueño, uno que sufrió harto fue Rubén Marcos, quién se vino a jugar por el "Ballet" desde su natal Osorno. Cuando el talentoso volante se instaló en la capital el club lo ubicó en un departamento de calle Bulnes. El lugar estaba bien bonito y cómodo, pero el problema era el ruido que todas las noches metían, sobre todos los locales nocturnos del sector. Marcos acostumbrado al silencio rural no podía conciliar el sueño en medio de la música, los bocinazos y los gritos de los revoltosos nocturnos. Lo peor de todo es que a la nueva incorporación del chuncho se le veía trasnochado en los entrenamientos, por lo que no faltaban las bromas y risas entre sus compañeros. Por suerte, con el pasar de las semanas y meses los oídos de Rubén se fueron acostumbrando al ruido de la gran ciudad. Farra infantil En el torneo de 1965 la U fue una máquina de eficiencia, logró 57 de los 68 puntos en disputa (cerca de un 84 por ciento de rendimiento), lo que le permitió levantar la copa cuando todavía quedaban dos fechas para el final. Fue en la visita de los azules a Playa Ancha, para enfrentar a Santiago Wanderers (duelo que se ganó por la mínima, con gol de Marcos). Esa tarde noche los jugadores estaban tan contentos que la celebración post partido fue tan inolvidable como el título. Pero el caso más emblemático fue el del argentino Juan Carlos Oleniak, quien no halló nada mejor que festejar junto a su hijo de tres meses edad. El tema es que la señora había viajado a Buenos Aires y había dejado a Oleniak a cago del menor, quien fue la mascota del plantel durante esa loca velada, que duró hasta , la madrugada del otro día. Nunca se supo qué pasó en la casa del delantero al regreso de la madre viajera, ya que no debe haber estado muy contenta con las andanzas de Juan Carlitos junto a su pequeño nene. Los miedos de Araya Pedro Araya, denominado el "Garrincha chileno" fue uno de los mejores punteros derechos que se han visto en canchas chilenas. Era encarador y anotaba hartos goles, pero su gran cualidad era esa finta terrible que dejaba tirado en el piso a cualquier defensa que le salía al paso. Fue protagonista casi absoluto del "Ballet", ya que estuvo en todos los títulos, a excepción del de 1959, lo que lo transformó en uno de los símbolos del mítico equipo. Sin embargo su gran explosión fue en 1967, cuando su nombre fue conocido internacionalmente luego del sudamericano de ese año, en el cual tuvo actuaciones memorables. Fueron tantos los que quedaron asombrados con la calidad de Araya que muy pronto llegaron suculentas ofertas para llevarse al pequeño puntero a otras latitudes. Sin embargo, cada propuesta se topaba con la negativa de Pedrito, que estaba inseguro y temeroso de dejar el propio terruño. Primero fue Santos que llegó a poner sobre la mesa 200 mil dólares, toda una fortuna para la época; luego Nacional, que ofreció 200 millones por un año de contrato; y después vino a buscarlo uno de los grandes de Argentina. Esa última vez ya estaba todo listo, pero el delantero criollo se arrepintió, a última hora. con llanto incluido, lo que obligó a deshacer la operación. Finalmente, Araya terminaría igual en el extranjero, primero en el Santos y luego en el Atlas de Guadalajara. Aunque cuentan que estuvo como una semana despidiéndose de sus amigos. Los temores recién se le pasaron en tierras paulistas. La loca aventura de Leonel En una ocasión, por una mezcla de razones (entre motivos disciplinarios y también por lesión) Leonel Sánchez no fue considerado en la nómina de jugadores que iría a Viña del Mar, para disputar un partido con Everton, válido por el campeonato oficial de ese año. Algo disgustado el zurdo decidió ir igual a la ciudad jardín, para hacer causa común con sus compañeros. Y no halló nada mejor que ir en el mismo tren que por esos días solía transportar a lo barra oficial de los azules. Como era de suponerse Sánchez fue reconocido casi de inmediato por los hinchas que lo subieron al mismo carro en que viajaban, cosa que fue imposible de evitar para el delantero. Aun más, ya dentro del convoy los fanáticos presionaron a Leonel para que los entretuviera con mil y una anécdotas, tanto de la U como de la selección chilena. Fue una experiencia casi religiosa para los barristas que nunca imaginaron tener de cerca y por un buen rato a una de las figuras del equipo. Y para nuestro protagonista toda una curiosa aventura que le permitió vivir, por una horas, desde el ángulo de los hinchas. Cuando Leonel Sánchez se apareció por el Estadio Sausalito lo primero que contó fue el viaje que acababa de tener junto a la barra, ante la mirada sorprendida del resto de los jugadores, que no daban mucho crédito a su inusual relato....Cosas del fútbol. HDF/Croata ![]() Siguiendo lo que ya hicimos, respecto de las marcas más importantes de jugadores chilenos, en la historia de nuestro fútbol, esta vez nos propusimos rescatar las que tienen que ver con equipos de nuestro medio, registro que parte en 1933, con los "Aguerridos" de Magallanes y su primer título de la en ese entonces naciente Liga Profesional. Acá van las 30 más importantes: 1. Primer campeón del fútbol profesional chileno: Magallanes (1933). 2. El primer tricampeón del fútbol chileno: Magallanes (1933-35). 3. Equipo con más títulos en Chile: Colo Colo (32). 4. Equipos fundadores del fútbol profesional en Chile: Magallanes, Colo Colo, Unión Española, Audax Italiano, Morning Star, Badminton, Green Cross y Santiago National. 5. Primer campeón de provincia (regiones): Everton (1950). 6. Primer campeón de segunda división: Palestino (1952). 7. Equipo más antiguo: Santiago Wanderers (1892). 8. Equipo que inauguró los descensos en Chile: Iberia (1955). 9. El primer equipo chileno que ganó en Argentina: Colo Colo (1996). 10. El primer equipo chileno que ganó en Uruguay: Cobreloa (1981). 11. El primer equipo chileno que ganó en Brasil; Colo Colo (1973). 12. El único equipo chileno que nunca bajó a segunda división: Colo Colo. 13. El primer equipo tetracampeón en Chile (4 títulos seguidos): Colo Colo (2006-07). 14. El primer equipo de provincia que jugó en primera división: Santiago Wanderers (1937). 15. El equipo más campeón de regiones: Cobreloa (ocho veces). 16. El único equipo que salió campeón, el mismo año de su ingreso a la primera división: Unión San Felipe (1971). 17. El único equipo chileno que ha salido campeón de la Copa Libertadores de América: Colo Colo (1991). 18. El único equipo chileno que ha salido campeón de la Recopa: Colo Colo (1992). 19. El único equipo chileno que ha salido campeón de la Copa Sudamericana: Universidad de Chile (2011). 20. Los únicos equipos chilenos que han salido campeones de la Copa Interamericana: Colo Colo (1992) y Universidad Católica (1994). 21. Equipos chilenos que han jugado finales de la Copa Libertadores de América: Colo Colo (1973), Unión Española (1975), Cobreloa (1981-82) y Universidad Católica (1993). 22. Unico equipo chileno que ha jugado dos años seguidos la final de la Copa Libertadores de América: Cobreloa (1981 y 1982). 23. Equipos chilenos que han salido campeones del torneo nacional (a noviembre de 2020): Colo Colo (32), Universidad de Chile (18), Universidad Católica (14), Cobreloa (8), Unión Española (7), Audax Italiano, Magallanes y Everton (4), Santiago Wanderers (3), Palestino y Huachipato (2); Santiago Morning, Green Cross, Unión San Felipe, O´Higgins y Cobresal (1). 24. Equipos autores de las mayores goleadas, en partidos del torneo oficial: Unión Española a Morning Star: 14 x 1 (1934); Magallanes a Santiago National: 14 x 1 (1934). Independiente de lo anterior, la mayor goleada, entre equipos profesionales, se registró el 30 de abril de 1950, cuando Everton derrotó a Santiago Wanderers por 17-0, por el torneo especial o de preparación "Carlos Varela". 25. Equipo con más triunfos consecutivos: Universidad de Chile (16, entre 1963 y 1964). : 26. Equipo con mayor invicto como local: Cobreloa (91 duelos, entre 1980 y 1985). 27. Equipo con más puntos en un mismo torneo: Universidad Católica (74, en 34 partidos, en 2010). 28. Equipo con mayores ascensos y descensos: Rangers de Talca (nueve, respectivamente). 29. Equipo con la racha invicta más larga en un mismo torneo: Universidad de Chile (33, en 1999). 30. El primer equipo chileno que jugó la Copa Libertadores de América: Universidad de Chile (1960). HDF/jma El más antiguo club de fútbol capitalino surgió en la antigua Escuela Normal, donde antiguamente se formaban los profesores del país. Allí, el 27 de octubre de 1897 una veintena de entusiastas y visionarios jóvenes decidió formar un club deportivo, sumándose así a una moda en varias zonas del país, donde este popular deporte, traído por los "gringos", generaba cada vez más adeptos entre los chilenos. La denominación inicial fue "Atlético Escuela Normal".
Posteriormente, en 1899, el Atlético Escuela Normal se fusionó con un equipo de la Escuela de Artes y Oficios y pasó a llamarse "Britania FC", cuadro compuesto por profesores y alumnos, que compitió en los inicios de las ligas santiaguinas.. Más tarde, en 1901 una parte de los jóvenes del Britania decidió crear otro club, al que llamaron "Baquedano FC". Ambos equipos convivieron por un tiempo, pero el que prevaleció fue el Baquedano. Finalmente, en 1904, el Baquedano fue aceptado en la Asociación Santiago y durante la asamblea del club, con motivo del séptimo aniversario, se propuso oficialmente re bautizar a la institución como Magallanes, moción que fue ampliamente aceptada por los socios. Se cree que el nombre surgió, a raíz de que en esos años uno de los temas más relevantes del acontecer nacional era el conflicto limítrofe con Argentina. HDF/jma Foto: formación de 1923 En todos los equipos de nuestro país, sin excepción, hay historias raras y chistosas dignas de contar. Aquí les presentamos siete para comenzar....
Arqueros vialinos. En 1968 Arturo Fernandez Vial presentaba sus credenciales para postular al campeonato de ascenso, anhelo muy perseguido por esa centenaria institución que ya se sentía preparada para dar el salto al profesionalismo. En conferencia de prensa los dirigentes aurinegros hablaban de tradiciones, proyectos y otros detalles de la postulación cuando se tocó un tema curioso, que tenía relación con los últimos arqueros que había tenido el club. Lo cierto es que los tres más recientes habían sido Obregón, Robles y Pino; todos apellidos madereros, por lo se decía que en el Vial "había buena madera" para afrontar los nuevos desafíos.... El ballet miedoso. En 1964 el equipo de la U mas conocido como el "Ballet Azul" tenía que viajar a Copiapó para disputar un parido amistoso y ya cuando el avión se aprestaba a despegar un desperfecto obligó al piloto a volver al aeropuerto para que revisaran la aeronave. Fue tanto el miedo que invadió a muchos jugadores que la mayoría no se quiso subir al siguiente avión que se dispuso para el viaje. El más temeroso era el defensor Sergio Navarro, quien ofreció a varios la opción de irse en auto hacia para el norte. Al final una mitad abordó el nuevo avión y la otra se fue en varios vehículos. Los primeros llegaron sin problemas, y los segundos vivirían las mil peripecias en el trayecto. Incluso Navarro fundió el motor en Coquimbo y tuvo que arrendar un taxi, el que también quedó varias veces en pana. El llanto de los jugadores árabes.. A fines de los 60 el equipo de Palestino regresaba de Rancagua, después de un duelo con O'higgins, en el que habían sufrido una dura derrota por tres a cero. La mayor parte del plantel dormía en sus asientos cuando, de repente, se prendieron las luces y el entrenador Hugo Tassara se dio cuenta que varios jugadores estaban llorando. Impresionado por la situación el DT les dijo que no era para tanto, que era sólo una derrota y que ya vendría la rehabilitación. En eso se paró uno de los futbolistas y entre risa y lágrimas comentó: "No pasa nada profe, lo que ocurre es que un chistocito desparramó un frasco de pimienta que nos ha picado a todos en los ojos". El bromista había sido el "Tano"Almeyda que estaba bien escondido y muerto de la risa, en una de las butacas de atrás. Origen de los colores de Coquimbo Unido. Cuenta la historia que a principios del siglo XX arribó al puerto de Coquimbo un barco inglés que traía, entre sus marineros, a todo un equipo de fútbol Al bajar a tierra los navegantes británicos fueron los primeros en practicar este deporte en la ciudad. De hecho, mientras jugaban en una de las plazas decenas de curiosos se juntaban para mirar lo que hacían los gringos, al principio con suspicacia, pero al final con franco entusiasmo. Los europeos, en señal de simpatía decidieron dejar sus camisetas que lucían los tradicionales colores aurinegros del actual elenco "pirata". Breve historia del nombre de Rangers. Uno de los socios fundadores del club talquino, Jorge Donoso, recordaba, hace décadas atrás, como fue que le pusieron Rangers al club piducano. El añoso dirigente contaba que entre los que formaron la institución figuraba Luis Greenstreet y su padre Juan, un ingles radicado en Chile que era muy simpático y bueno para la talla. Resulta que en una de las primeras reuniones se invitó a don Juan precisamente para discutir el nombre que se le daría al club. Y el británico lleno de nostalgia exclamó "pechos rojos" rememorando al club de su tierra natal. Después de eso, el grupo se decidió por Rangers, inspirados en el club de la liga inglesa, que significa "gurdianes, defensores, vigilantes". Ellos serían los defensores del fútbol talquino. El "yeta" de Melipilla. A principios de los 70 el cuadro de Melipilla ganaba por lejos un partido por el torneo zonal, cuando súbitamente las cosas empezaron a empeorar. El rival descontó, las pelotas no entraban, los jugadores estaban ofuscados y la figura del equipo salió por lesión. En eso jugadores y dirigentes comenzaron a mirar en dirección a la galería ¿Dónde está? ¡Búsquenlo y sáquenlo luego! gritaban algunos. A los pocos minutos entre cinco llevaban a un individuo fuera del estadio. Lo más increíble es que tras el episodio Melipilla volvió a jugar bien y salieron mas goles, con lo que ganó cómodamente el partido. El misterioso espectador era conocido como "Fúlmine", y lo que ocurría es que cada vez que iba a la cancha el equipo perdía o pasaba algo.Tanta era la preocupación de los directivos que habían prohibido venderle entradas., pero él se metía a escondidas amenazando el rendimiento deportivo del equipo de los pollos. Marcas curiosas del Everton campeón de 1950. A final del torneo de ese año el cuadro viñamarino junto con bajar su primera estrella logró tres marcas dignas de mencionar. Fue el primer club provinciano, en obtener el título; el primero, en ganar un torneo en tiempo complementario; y el primero en ser proclamado campeón, en horas de la madrugada. /HDF -jma Hasta hace poco la historia aceptada sobe la fundación del club árabe era que en 1920 un grupo de descendientes que participaban en una olimpiada de la colonia, en Osorno, habían decidido formar un club de fútbol, después de lo cual se inicia el camino, primero amateur, y ya después profesional, a principios de los 50.
Sin embargo, en el último tiempo ha surgido nueva información que va aclarando, en parte el verdadero origen de Palestino. Según las investigaciones, el 25 de marzo de 1916 un grupo de importantes personajes de la colonia residente en Chile dieron vida al Club Sportivo Palestina, "con el objetivo de cultivar el fútbol, box, ciclismo y tenis". Ese parece ser ahora el momento inicial. Pero hay más, ya que cuatro años después (8 de agosto de 1920) otro grupo de descendientes funda el Palestino Sport Club, que aparentemente era una rama totalmente dedicada al fútbol y de la cual derivaría, en forma directa, la actual institución. Este Palestino Sport Club deambulo por el fútbol amateur por cerca de 30 años hasta que en enero de1950, a raíz del título logrado en las Primeras Olimpiadas del Frente Unido Juventud Chileno-Arabe, realizadas en Osorno (al que asistió representando a a los descendientes capitalinos), da el salto para optar al fútbol profesional. Ello sucede dos años después cuando compiten en el primer torneo de ascenso de la historia, en el que obtienen el título, tras infartante definición con Rangers de Talca. Pero el proyecto original tiene su gran premio casi tres años más tarde cuando Palestino alcanza su primera estrella, de la mano de Roberto Coll, José "Pata" Fernández, Lorenzo Araya y Julio Baldovinos, entre otros. HDF/jma A comienzos de 2002 y con varios clubes en crisis económica (incluyendo Colo Colo y la U de Chile) la decisión ya estaba tomada, la ANFP estaba empecinada en retomar el experimento de 1997 cuando se dividió el torneo nacional en dos campeonatos (apertura y clausura), lo que significaría la instauración de los torneos cortos. Esta vez, a diferencia del 97, el cambio iría un poco más allá, ya que se implementaría el sistema mexicano, que consideraba una fase de grupos y luego una modalidad “playoffs” para dirimir al nuevo campeón del fútbol chileno.
Sin duda, se trataba de un mega cambio en el fútbol chileno, que llevaba largos años –a excepción del citado 1997- jugando torneos largos de 30 o más fechas. Los defensores del nuevo modelo argumentaban que esta forma de campeonato aumentaría la posibilidad de que los equipos más chicos (con planteles más cortos) pudiesen tener más opciones de salir campeones. Las cosas no partieron bien ese año, especialmente para los albos, puesto que el 23 de enero el 22º Juzgado Civil de Santiago decretó la quiebra del club por una deuda de más de 30 millones de dólares. La debacle en las arcas del cacique afectó inevitablemente en lo deportivo. Partieron del Monumental figuras como Héctor Tapia, José Luis Sierra, Claudio Arbiza, Sebastián Rozental, Claudio Villaseca y Francisco Rojas. Veinticuatro días después, el 16 de febrero se daba el puntapié inicial al torneo de apertura, en el Estadio Municipal de Calama. Ese día el Cobreloa perdió sorpresivamente en el debut, por 3 a 1, ante Palestino. Los 16 equipos de primera A jugarían una primera fase de 15 fechas, divididos en cuatro grupos de cuatro clubes. Desde el comienzo de la etapa regular se notó, claramente, cuales serían los equipos que dominarían el torneo. Es que a diferencia de los campeonatos largos, ahora los que rápidamente se ponían a punto o los que entraban en racha tendrían más opciones de llegar más alto. En ese sentido, los tres grandes comenzaron bien, aunque también lo hicieron Palestino y Rangers. Entre los duelos atractivos de la fase de grupos hay que mencionar la reñida victoria de los árabes ante Deportes Concepción, por 4 a 3, en la segunda fecha, en una guerra de goles en La Cisterna. O la aplastante goleada de la UC, ante Cobresal, por 7 a 0, en la décima jornada. Aunque también dio que hablar el triunfo de Colo Colo sobre la U, en la fecha 13. Fue un humillante 3 por 0, que se celebró con el alma, ya que los albos no le ganaban a su clásico rival desde 1998. En ese clásico el héroe fue un muchacho de La Legua llamado Francisco Huaquipán, quien marcó dos golazos de antología. Tras las 15 fechas, en el tope de rendimiento figuraban Colo Colo y la UC (con 30 y 29 puntos respectivamente). Después aparecía el sorprendente Palestino, con 26 unidades; la Universidad de Chile y Santiago Wanderers, con 26 unidades cada uno; y Rangers de Talca, con 24 puntos. Por su parte, los peores fueron Cobresal, Deportes Concepción y Unión Española que no superaron las 14 unidades. Comienza la emoción Clasificaron a la siguiente etapa (sextos de final) los tres primeros de cada grupo, tras lo cual se sortearon seis parejas que jugarían en partidos de ida y vuelta. La UC y Palestino no tuvieron grandes problemas para eliminar respectivamente a Huachipato y Coquimbo Unido, mientras que Cobreloa debió esforzarse al máximo para vencer a Santiago Wanderers en dramática definición a penales en Valparaíso (fue el primer partido que se dirimió en tandas desde los 12 pasos, algo que después sería muy común). La tarea le tocó más fácil a Colo Colo que despachó a Santiago Morning en un marcador global (ida y vuelta) de 10 goles a 2. Pero, sin lugar a dudas, donde la emoción estuvo en carne viva fue en los duelos entre U. de Chile/Unión San Felipe y Rangers/Deportes Temuco, ya que ambos partidos se definieron con el recordado “Gol de Oro”, otro registro, hasta esa minuto, inédito en la historia del fútbol chileno. Ya en cuartos de final, Rangers sufrió en demasía para eliminar a Palestino, ya que tras sendos empates logró pasar gracias un gol de visita. Por su parte, Colo Colo se deshizo fácilmente de Cobreloa, mientras que las universidades no la tuvieron fácil frente a Temuco y Wanderers, consecutivamente. Lo interesante estaría guardado para las semifinales, ya que en la primera llave se enfrentaron la UC y la U en dos partidos a muerte, sobre todo en el primero, en el que terminaron empatadas a tres tantos, luego de una épica remontada cruzada que iba perdiendo por 3 a 1 bien entrado el segundo tiempo. La UC finalmente se quedaría con el paso a la final, la tarde noche de 23 de junio, gracias a dos estocadas del paraguayo Jorge Campos, que apagó el sueño azul. En la otra llave se enfrentaban Rangers de Talca y Colo Colo que aparecía como el amplio favorito. Pero pese a todos los pronósticos el cuadro “piducano” sacó ticket para la final con un gran partido como local (triunfo 2 por 1) y un trabajado empate en el Estadio Monumental, que dejó con las manos vacías al gigante albo. La UC, Primer campeón de los torneos cortos El 26 de junio de 2002 más de 15 mil personas repletaban el antiguo Fiscal de Talca, ese noche una multitud de hinchas locales estaban deseosos de vivir una jornada histórica para sus colores. La idea ganar en casa, para luego ir a pelear con todo a San Carlos Apoquindo, tal como lo habían hecho días antes con Colo Colo. El cuadro de Oscar del Solar había sido uno de los más sólidos del torneo, con un equipo equilibrado donde sobresalían Nicolás Peric, en el arco; Marcos González, en la zaga; Matías Guerrero, en la creación; y la dupla Rubén Vallejos/Luis Díaz, en el frente de ataque. Pero al frente estaba la temible UC de Juvenal Olmos, una escuadra que combinaba una dosis perfecta de experiencia y juventud, con figuras como Miguel Ramírez, Cristián Alvarez, Milovan Mirosevic, Pablo Lenci, Arturo Norambuena y Jorge Campos. El equipo estudiantil había sido junto a Colo Colo uno de los más regulares de la primera fase y no había sudado mucho para llegar a la gran final. El partido, quizá a causa de la copiosa lluvia que cayó esa noche en Talca, no fue de gran factura, es más estuvo marcado por lo trabado del juego y las impresiciones. Pero en esa lucha fueron los cruzados los que se vieron mejor y en un contragolpe, a los 57 minutos, Daniel Pérez tiro un remate cruzado que venció la resistencia de Peric. Los locales sintieron el duro golpe y tardaron un rato en darse cuenta que ahora lo importante era no perder. Y la solución vino desde la banca, ya que el argentino Miguel Risso, que ingresó a los 63 del segundo lapso, puso el agónico empate cuando se disputaba el primer minuto de descuento, lo que encendió la ilusión de los forofos locales. En el duelo de vuelta (30 de junio) San Carlos de Apoquindo era una verdadera caldera hirviendo, más de 20 mil fanáticos cruzados alzaban sus banderas en lo que se pronosticaba como una jornada histórica, ya que de ganar sería la primera vez que la UC se titularía campeón en su estadio cordillerano. Desde el pitazo inicial los locales se fueron encima de su presa, a veces con más ganas que fútbol, en una presión asfixiante que luego de más de 40 minutos de juego parecía no dar frutos. Es mas los talquinos habían aguantado el chaparrón inicial y ya se habían aparecido tibiamente por el arco de Walker. En eso estaba el partido cuando a los 45 minutos vino una desinteligencia en la zaga de Rangers y Arturo Norambuena aprovecho el regalo para abrir la cuenta, ante el delirio de los hinchas católicos. Ya en el segundo tiempo y cuando los espectadores recién se estaban reacomodando en sus asientos, vino un terrible desborde por la izquierda de Jorge Campos, que centró hacia el corazón del área para que Norambuena la tocara a un costado de Peric. Era el 2 a 0 y ya Rangers estaba herido de muerte. Lo que vino después fue un monólogo, la UC jugando a sus anchas y el cuadro visitante sólo esperando que el reloj avanzara para que se terminara la pesadilla. Y vendrían todavía más goles, Daniel Pérez, con una ajustada zurda, a los 17; y Milovan Mirosevic, a los 27, con un cabezazo en la boca del arco. Así la UC logró una inolvidable octava estrella, por primera vez en su nuevo estadio y regalándole la gloria a toda su hinchada. Sería el corolario perfecto para ese torneo de apertura 2002, que quizá por la novedad y las emociones nuevas dejó un buen recuerdo en la afición. (JM) l Es 1954 y por fin la ciudad de Rancagua logra el ansiado anhelo de tener fútbol profesional. En el torneo de ascenso de ese año dos clubes funden sus esfuerzos para enfrentar con posibilidades la competencia. Se trata del Instituto O`higgins, conformado por estudiantes y jóvenes entusiastas y el Braden, equipo creado bajo el alero de la compañía minera estadounidense Braden Cooper. Así nacía el O'higgins-Braden, que compitió esa temporada con un tercer club rancaguino. el América, de menor representatividad en la ciudad.
Al final de 1954 y tras una brillante campaña O`higgins-Braden conseguía el sueño de titularse campeón del ascenso, logrando así el paso a la división de honor del fútbol chileno. En ese momento, y tras acalorados debates y conversaciones se dispuso que O'higgins-Braden y América también debían unificarse, para así tener una adecuada presentación en primera. Meses mas tarde, precisamente el 5 de abril de 1955, el objetivo se abrochaba y nacía a la luz O'higgins de Rancagua, que debutaría en su Estadio Braden (Hoy El Teniente). /JotaEme La rica y fructífera historia del equipo albo está llena de momentos de gloria y triunfo, Desde el primer título invicto, en el ya lejano 1937, el cacique ha llenado páginas y páginas con sus más de 30 coronas que hoy engalanan sus vitrinas. Siempre fue y ha sido un protagonista en todos los torneos que ha jugado, pero quizá la única excepción a la regla se registró en 1945, donde increíblemente el en ese entonces campeón vigente del fútbol chileno completó una temporada para el olvido, ubicándose en la penúltima ubicación de la tabla, Es, sin duda, el peor desempeño del cuadro popular en sus más de 95 primaveras,
¿Qué pasó ese año? ¿Cómo se gestó ese torneo de pesadilla? El torneo 1945 comenzó a mediados de mayo, luego de unos primeros meses del año donde el protagonismo estuvo focalizado, cien por ciento, en el Campeonato Sudamericano jugado en Santiago. Certamen donde la Roja rozó el título, negado solo tras la derrota con Brasil. Una caída que generó en el medio futbolero una amarga desilusión y de la cual costó varias semanas sobreponerse, En ese ambiente bajo en energía comenzó la disputa de una nueva temporada del fútbol profesional en el cual el campeón defensor, Colo Colo, sólo anunció una incorporación, el back centro Francisco Urroz, joven promesa proveniente de Unión Española. La idea del entrenador, Luis Tirado, era apostar por el mismo equipo del año anterior, que había ganado el título en apretado final con Audax Italiano. La oncena alba titular partía con Fernando Araya, en el arco; Jorge Vasquez y Guillermo Fuenzalida; Francisco Hormazábal, José Pastene. Gilberto Muñóz, Juan Aranda y José Peñaloza; Alfonso Domínguez, Norton Contreras y Tomás Rojas. El inicio es malo, ya que en las dos primeras fechas pierden con Santiago Morning y Everton, encuentros en los que todo el equipo muestra un bajo nivel. Si embargo, a la semana siguiente logran derrotar a Magallanes, lo que mejora un poco el ánimo. Pero, lamentablemente, las buenas noticias duran poco y comienzan las lesiones, que se transformaron en la peor maldición del año. Todo partió con las bajas de Luis Sabaj y Fernando Araya, arqueros titular y suplente, hecho que afectó mucho a la retaguardia, ya que nunca se pudo encontrar un reemplazante a la altura. Después, se lesionó Alfonso Dominguez, al que tampoco se pudo suplir de manera efectiva. Y para colmo, semanas después se apartaron del equipo, por el mismo motivo, Francisco Hormazábal, Jorge Vasquez y Oscar Medina A esa altura del campeonato, el cacique ya registraba varias derrotas y estaba muy lejos de los lugares de avanzada, donde sorprendía a todos la gran campaña de Green Cross. Ya en el primer partido de la segunda rueda las lesiones persisten y armar el equipo es casi un acertijo para el técnico, que opta por hacer ingresar al gran Enríque Sorrel, quien ya estaba al borde del retiro. Pero la mala suerte sigue rondando y el "Tigre" se desgarra, tras lo cual deja definitivamente el fútbol. Sólo en una ocasión, semanas después, logra reunirse todo el equipo titular, partido en el que se vence con claridad a Everton 5 por uno. Pero la victoria sobre los ruleteros es sólo un espejismo, porque el equipo vuelve a caer un un pozo, lo que coincide con una nueva lesión de Hormazábal. En ese momento ya no había vuelta, todo se había confabulado en contra de los blancos. Y había dos grandes razones que lo explicaban todo; la ausencia obligada de los jugadores más importantes de la plantilla y el escaso nivel de relevo que había de los futbolistas titulares. Cuando cayó el telón del torneo 1945 los números de Colo Colo eran inimaginables. Apenas 19 puntos en 22 encuentros jugados, penúltimo lugar (sólo arriba del colista Badminton). A partir de ahí, solo se podía mejorar. /HDF ![]() Después de un infartante y exitoso ascenso en 1957, a costa de Santiago Morning, Deportes La Serena planificó en forma seria y tranquila su debut en primera división para el campeonato de 1958. La idea era no ser una mera comparsa en el torneo, sino que reforzarse bien y competir, de igual a igual, con todos los demás equipos. Esa fue la apuesta y tanto dirigentes como cuerpo técnico y jugadores se propusieron dar el todo para responder y estar a la altura de la enorme efervescencia y expectación que invadía por esos días a la bella ciudad nortina. El rápido y efectivo acople del equipo, más la convicción del trabajo bien hecho hicieron que la escuadra granate mostrara buenos resultados desde un comienzo, así lo demostraron las tres primeros duelos, donde ganaron a la UC (2x 1), Rangers (1x0) y Unión Española (1x0). ¿Cual fue la clave? Sin duda que lo más importante fue encontrar los jugadores justos para todas las líneas de juego. En ese sentido, hay que destacar la seguridad de Francisco Fernández, en el arco; la solidez y aplomo de Arturo Farías, en la defensa; la habilidad y visión de juego de Juan López, en el mediocampo; y la capacidad goleadora de Juan Verdejo. El inicial trío de victorias al hilo colocó a La Serena en la punta del torneo, lo que sorprendió gratamente al medio futbolero nacional, que rápidamente enfocó la mirada hacia el desempeño de la escuadra papayera. Y la sorpresa pasó a ser proeza, ya que el equipo siguió ganando en las tres fechas siguientes (venció a O`higgins -3x2-, Magallanes -2x0- y Feerobadminton -2x0-). A esa altura, Deportes La Serena se convirtió en el primer equipo, en la historia del fútbol profesional chileno, que, tras ascender a primera división, logró seis triunfos consecutivos, convirtiéndose en líder del campeonato. Producto de la espectacular campaña la afición serenense se volvió algo exitista y creyó que el equipo era prácticamente imbatible. Por eso, la primera caída, ante Green Cross (0x1) en la séptima fecha fue un balde de agua fría para los seguidores, que esbozaron algunas tímidas críticas. Y había algo de verdad, el equipo sintió el trajín y apareció la irregularidad. Se le ganó espectacularmente a Colo Colo en un abarrotado Estadio La Portada (3x1) y a la fecha siguiente, se perdió inapelablemente con Santiago Wanderers (1x4). El paso en falso con los porteños hizo que los jugadores tomaran aire, para retomar el nivel de juego, lo que trajo dividendos en los últimos cuatro partidos de la primera rueda (dos empates, con la U y Palestino; y dos victorias, con Everton y Audax). Pese al bajón, nada impidió que La Serena terminara como exclusivo puntero, al finalizar la primera rueda, toso un logro para un conjunto que debutaba en la serie de honor. Un elogiable segundo lugar Ya en la segunda parte del campeonato, indudablemente que el esfuerzo y desgaste realizado hasta ahí pasaron la cuenta. En las tres primeras fechas La Serena sólo consiguió un punto, lo que permitió que Colo Colo lo alcanzara en la punta. Y entre la quinta y la octava, tras empates y más derrotas cedió el liderato, en beneficio del cacique. Clave fue el partido con los albos, donde los serenenses se inclinaron 4x2, en vibrante encuentro. Además, esa altura también Santiago Wanderers (futuro campeón) los sobrepasó, lo que instaló a los granates entre el tercer y cuarto lugar. En esos momentos la escuadra nortina sintió que debía hacer un último esfuerzo y luchar con todo por el título. Y la verdad es que eso se plasmó en la cancha, ya que en los últimos cuatro duelos recuperaron gran parte de esa impronta que sorprendió en la primera rueda. Primero una contundente victoria sobre la U (3X1), luego un desgraciado empate a dos con Everton (la victoria se perdió en los minutos finales) y finalmente dos sendos triunfos -tres por dos- frente a Palestino y Audax Italiano. Al final, sólo un punto los separó del monarca Santiago Wanderers, pero eso no le quita mérito a la inolvidable e histórica campaña que realizó ese año Deportes La Serena. Un 1958 donde el campeón del ascenso pudo ser, el mismo año, el campeón de primera. /HDF |